Nokia y el 2013

En un inexplicable movimiento Nokia se pierde la campaña navideña en España. Su mejor apuesta, el Lumia 920, no llegará a nuestro país hasta la primera quincena del mes de enero. Es sorprendente, sobre todo porque está disponible en otros países de Europa y en EE.UU., donde las ventas son buenas. 

El premio de consolación es el Lumia 820, el único teléfono de la nueva gama -con Windows Phone 8- que sí estará disponible desde esta semana. Es más pequeño (4,3 pulgadas de pantalla) y la cámara no tiene el estabilizador óptico de imagen que hacen del 920 una de las apuestas interesantes en fotografía móvil. Es, a cambio, más barato y ligero y al igual que el 920 puede cargarse de forma inalámbrica si se le pone la carcasa adecuada, que en este caso se vende como accesorio. Costará 499 euros libre.

Los dos tuvieron su presentación oficial la semana pasada pero casi más interesante que estos dos smartphones de gama alta y media es la tercera apuesta para 2013. Un móvil de gama de entrada bautizado como Lumia 620. 

Es el primer móvil Windows Phone 8 que baja de los 300 euros de precio libre (costará 269 euros). Por supuesto el precio supone sacrificar aún más pantalla, que se queda en 3,8 pulgadas y la cámara de fotos es de cinco megapíxeles en lugar de ocho pero es un móvil Windows Phone 8 en pleno derecho, con aplicaciones de Office y 7 Gb de espacio de almacenamiento en Skydrive. 

Para Microsoft será un teléfono clave, sobre todo si quiere frenar el avance de Android en la gama baja y en los países emergentes, como China. En Asia muchos fabricantes ofrecen ya teléfonos con Android por debajo de los 150 euros pero el 620 es un buen primer paso en esa dirección. 

Para Nokia, en cambio, es un modelo con mayor implicación porque entra a competir directamente con la gama de teléfonos Asha, que aún usan Symbian. Con Symbian Nokia puede llegar a puntos de precios mucho más bajos, pero el sistema operativo no despierta el mismo interés que Android. Windows 8 es el candidato natural para sustituirlo a medio plazo, conforme sea posible integrar el sistema operativo de Microsoft en teléfonos cada vez más económicos.