A pesar de que cada vez hay más y más soluciones para todo en Internet, hay una que no acaba de estar resuelta del todo: la transferencia de archivos. Hace unas semanas pudimos hablar con Simon Hosell, que nos presentó una solución a este problema usando Facebook y P2P: Pipe.
Pipe no podría ser más sencillo. Es una aplicación de Facebook en la que eliges a un amigo, arrastras un archivo a la tubería y se le envía directamente. El amigo recibirá una notificación para que se conecte a Pipe y pueda recibir el archivo. Si no está online, se quedará guardado en el locker o armario, un espacio de almacenamiento temporal que almacena archivos de hasta 100 MB.
Si el envío es directo (tu amigo está conectado), el archivo se transfiere directamente entre los dos ordenadores sin servidores intermedios. Funciona todo lo rápido que vaya tu red, de forma privada y segura. Además, al no almacenar nada, no se enfrentan a problemas con las entidades de copyright.
Si el envío es directo (tu amigo está conectado), el archivo se transfiere directamente entre los dos ordenadores sin servidores intermedios. Funciona todo lo rápido que vaya tu red, de forma privada y segura. Además, al no almacenar nada, no se enfrentan a problemas con las entidades de copyright.
El único problema es que el límite para enviar archivos es de 1GB, lo que nos limita un poco. También el hecho de estar en Facebook nos limita un poco a la hora de enviar archivos a personas que no tengamos agregadas. Para Pipe sin embargo es mejor estar sólo en Facebook, para ser un servicio entre personas y no para compartir archivos.
Por lo demás, me parece que han acertado bastante con el producto. No va a resolver las necesidades de todos a la hora de compartir ficheros, pero sí que será muy útil para la mayoría de la gente. Pipe es gratuito y estará disponible mañana a mediodía aproximadamente.
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